Afghani #1 1 u. fem. Sensi Seeds

Las semillas Afghani #1 Feminizada se han creado con los mejores parentales indica de nuestra colección de cultivares afganos especiales. Las mejores hash plants de Sensi Seeds se han sintetizado en una variedad de semillas feminizadas de interior que proporciona a los cultivadores ejemplos de manual del genotipo «Afghanica», sin excepciones.

Cuenta con plantas fuertes, de tamaño mediano, con ramas laterales gruesas y una gran abundancia de hojas de color verde oscuro. Para plantas de tamaño completo con un rendimiento óptimo, las semillas de Afghani #1 Feminizada deben estar en fase vegetativa por lo menos de 8 a 10 semanas antes de la floración. Con un período de crecimiento más corto, las plantas pueden mantenerse en una altura final de menos de 100 cm. El aumento de altura durante la floración está en el rango indica normal, con plantas que casi doblarán la altura de la fase vegetativa durante el periodo de floración.

Esta variedad termina rápidamente, formando nodos muy cercanos de cogollos maduros de 7 a 9 semanas después del inicio de la floración. Las plantas cultivadas a partir de semillas Afghani #1 Feminizada suelen dar su mejor rendimiento con un solo tallo principal y las ramas sin podar. Las plantas a las que se aplica «técnicas como el topping» para aumentar la ramificación y los sitios de cogollos hay que darles varias semanas adicionales de tiempo de crecimiento antes de la floración.

Aunque el Cannabis indica toma su nombre de la India, las semillas de cannabis de Afganistán nos proporcionan los mejores ejemplos de la familia indica, bajita, potente y de floración densa. Todos los tipos de cannabis proceden del subcontinente indio, incluidas las indicas puras – que se encuentran principalmente en el norte montañoso del país. El patrón de crecimiento corto y rápido del genotipo indica es el resultado de la adaptación a las condiciones variadas y extremas de un entorno a gran altitud.

Se encuentran condiciones similares en las montañas afganas del Hindu Kush, que comparten la antigua tradición de la India de cultivo de cannabis y agricultura del hachís. Durante generaciones, las variedades indica afganas se han criado selectivamente por su potencia, peso y producción de resina. El resultado es un patrimonio genético, rico y dinámico, de indica afgana con un aspecto singular y decenas, si no cientos, de variaciones locales. Dos cultivares indica apreciados de valles vecinos pueden compartir el mismo aroma y tener cogollos con estructuras completamente diferentes; un par de variedades emparentadas de forma lejana podrían parecer idénticas, teniendo efectos muy distintos.

Los cogollos de Afghani #1 Feminizada pesan mucho y tienen un gran sabor, con un efecto indica relajante y muy potente. Cuando empieza la floración, los cálices ovales duros empiezan a agruparse en cada nodo, llenando la parte superior del tallo y las ramas con largos pistilos blancos. Los cálices se multiplican y se hinchan hasta un tamaño medio, compactándose a medida que se forman cogollos sólidos. Estos cogollos se agrupan en grupos más grandes y, cuando del 60% al 75% de los pistilos han cambiado de blanco a naranja, la sección superior del tallo principal debe ser una sola cola completamente cubierta de resina.

Gracias a la densidad y peso de esta variedad, incluso los grupos de flores más pequeños no conectados de las secciones inferiores de cada planta añaden una buena producción cuando se recogen. Por la misma razón, los cogollos de Afghani #1 Feminizada siguen pesando – manteniendo una buena proporción de su peso cuando están secos. Las grandes colas deberían conservar la mayor parte de su tamaño, reduciéndolo visiblemente poco durante el proceso de secado y curado.

Al examinar los cogollos secados de Afghani #1 Feminizada, resulta obvio por qué los antepasados afganos de esta variedad se conocen como ¡hash plants! Una capa espesa de tricomas – el ingrediente crudo del hachís – cubre completamente los grupos de flores maduras, así como las hojas de un solo dedo que crecen de ellas

Durante la manicura, las tijeras y los dedos se quedan siempre pegadas y pegajosas por los oscuros de tricomas pegajosos, lo que recuerda la forma en que se recoge el hachís fresco de los «charas» indios. Cuando se seca y se cura adecuadamente, al golpear ligeramente un cogollo de Afghani #1 Feminizada se libera una pequeña lluvia de polvo de color marrón amarillento. Se trata de las glándulas de resina en su forma seca, que se recogen para elaborar el hachís tamizado de Afganistán y Marruecos.

El rico sabor de la resina pura es un elemento fuerte del buqué de aromas de Afghani #1 Feminizada, junto con los aromas dulces, terrosos, a incienso y especias que son característicos de las indicas afganas.

Naturalmente, los cogollos producidos por Afghani #1 Feminizada tienen un efecto indica extremadamente potente, atractivo y duradero, que se centra en el cuerpo. Esta variedad es un estimulante del apetito maravilloso, y puede servir de gran ayuda para relajarse y conciliar el sueño. Mientras que a los fumadores recreativos inexpertos les puede parecer que la potencia indica de Afghani #1 Feminizada les da sueño en grandes dosis, los conocedores de las indica van a disfrutar del viaje de principio a fin.

Cuando experimentas la magia de una indica afgana original, comprendes por qué este genotipo es tan importante para el cultivo moderno. La mayoría de las mejores variedades híbridas de interior heredan su crecimiento compacto, formación densa de flores y producción excepcional de las hash plants afganas. Da igual tu experiencia, si cultivas en interior y si buscas una indica oscura, aromática de floración rápida, pesada y potente, ¡pide tus Semillas Afghani #1 Feminizada ya!